El Pleno del Estado de la Ciudad, que autoriza la permuta de los suelos de los desarrollos del sureste por terrenos en zonas ya urbanizadas en El Cañaveral, es un proyecto que no deja de avanzar, según ha explicado esta mañana la alcaldesa de Madrid, Ana Botella.
Gracias a esta acción, más de 1.500 familias podrán solucionar su necesidad de vivienda “en el menor plazo de tiempo” concretó Botella. El objetivo es contar con un planteamiento urbanístico que fomente un crecimiento a pesar de la crisis. Como dijo la alcaldesa: “esa es la filosofía del Nuevo Plan General: dejar de ser parte del problema para ser, cada vez más, parte de la solución”. Aun así, la propuesta no se ajusta en sentido estricto a la figura de la permuta, ya que la entrega es de suelo bruto de los desarrollos del sureste, mientras que lo que adquieren es parcela con edificabilidad de vivienda protegida.
Para ello, tendrán que modificar su enfoque normativo para poder alcanzar todas aquellas demandas y necesidades con las que cuenta “esta ciudad con proyección internacional” sentenció Ana Botella.
